Qué ver y hacer en Ho Chi Minh

Vietnam es uno de los destinos más famosos del Sudeste Asiático y Ho Chi Minh, también conocida como Saigón, es una de las ciudades más importantes del país y, por lo tanto, una de las más visitadas. Capital de Vietnam del Sur durante la guerra, actualmente es un importante centro financiero, un refugio del patrimonio cultural local y el escenario de algunas atracciones muy interesantes.

Recorrer los famosos túneles de Cu Chi, visitar el templo budista de Giam Lac, descubrir las vistas amplias de la ciudad desde el mirador del edificio Bitexco Financial, conocer el Museo de los Vestigios de la Guerra y recorrer el Palacio de la Reunificación son algunas de las mejores actividades que puedes hacer en Ho Chi Minh. A continuación te cuento más sobre cada una de ellas.

Si quieres vivir una de las mejores experiencias que Ho Chi Minh tiene para ofrecer, no puedes dejar de visitar los túneles de Cu Chi. Estos intrincados pasadizos subterráneos rescatan la historia vibrante y compleja de la Guerra de Vietnam, que mantuvo en vilo a la región entre 1955 y 1975.

Ubicados a las afueras de Ho Chi Minh, estos túneles desempeñaron un papel crucial en la estrategia de resistencia del Viet Cong durante el conflicto. Construidos a mano con una destreza asombrosa, los túneles permitieron a los guerrilleros norvietnamitas moverse sigilosamente bajo tierra, sorprender a las fuerzas estadounidenses y obtener un refugio seguro.

La visita guiada por los túneles de Cu Chi, que suele estar incluida entre los mejores tours de Ho Chi Minh, es una experiencia inmersiva que te llevará a los días de la guerra. Los guías locales expertos te contarán historias fascinantes sobre la construcción y el uso de estos pasadizos. Además, en estos recorridos también podrás explorar las trincheras, bunkers y escondites secretos que demuestran la astucia táctica utilizada por el Viet Cong.

Los túneles de Cu Chi son testimonios físicos de la tenacidad y creatividad de quienes los construyeron. En la visita, conocerás cómo los guerrilleros vivían, se abastecían y se comunicaban en estas estrechas galerías subterráneas y, si te animas, podrás descender a las profundidades para vivir la experiencia en carne propia.

Vietnam es considerado uno de los países con mayor cantidad de fieles budistas y eso se traduce en que todas las ciudades tengan una gran cantidad de edificios religiosos. Ho Chi Minh no es la excepción y en este sitio podrás conocer Giam Lam, un templo budista que, además de ser catalogada como una joya arquitectónica, brinda testimonio de la rica herencia cultural vietnamita.

Fundado en el siglo XVIII, el templo ha resistido el paso del tiempo y las vicisitudes históricas para convertirse en uno de los lugares de culto más venerados de la región. Su nombre, Giac Lam, significa “Adornos Virtuosos”, lo que refleja la esencia de la práctica budista que florece en este recinto. Durante tu visita te llamará la atención la pagoda, con sus intrincadas tallas y adornos que replican historias sagradas.

Además, en el corazón del templo, la estatua de Maitreya, el Buda del Futuro, preside la sala de oración. Durante el recorrido también podrás acceder a los jardines que rodean el templo y que ofrecen un refugio de meditación en un entorno de serenidad difícil de encontrar en otros rincones del caótico Ho Chi Minh.

Ten en cuenta también que la historia de Giac Lam está entrelazada con la evolución del budismo en Vietnam. A lo largo de los siglos, ha sido testigo de la devoción de generaciones de monjes y fieles que han contribuido a preservar y enriquecer la espiritualidad del lugar, por lo que este templo es considerado el epicentro del budismo en el país.

Hi Chi Minh, anteriormente conocida como Saigón, es una ciudad milenaria, pero desde la década de 1970 vivió una explosión financiera que la llevó a fusionar sus tradiciones con los vientos de cambio de la modernidad. Uno de esos cambios se manifestó en la construcción de una gran cantidad de rascacielos, que ofrecen miradores panorámicos. Bitexco Financial Tower es uno de ellos, y visitarlo merece la pena para conocer las mejores vistas de la ciudad.

Esta icónica torre tiene una altura total de 262 metros y ofrece una plataforma de observación desde la que es posible descubrir todo el espectro de la metrópoli vietnamita. Durante tu visita, además, podrás subir en un ascensor acristalado que te mostrará las primeras imágenes amplias de este singular destino.

Desde el mirador podrás observar como los rascacielos se entrelazan con los bulliciosos mercados locales y como las avenidas se encuentran completamente rodeadas de exuberante vegetación. El río Saigón, que serpentea entre los edificios, realza la riqueza arquitectónica y cultural de Ho Chi Minh que podrás descubrir a vista de pájaro.

Además, visitar el mirador de Bitexco Financial Tower es una de las mejores actividades para hacer al atardecer en Ho Chi Minh, para que puedas combinar los colores anaranjados de la puesta de sol con algunos de los monumentos históricos de la ciudad que se distinguen en el horizonte, como la Catedral de Notre-Dame y el Palacio de la Reunificación.

Si quieres conocer el verdadero perfil de Hi Chi Minh, no puedes dejar de embarcarte en una travesía en motocicleta a través de las bulliciosas calles de la ciudad. Estos tours, que forman parte de las mejores excursiones de este destino, te permitirán descubrir el pulso vibrante y caótico de la vida urbana vietnamita.

Los tours en motocicleta te permitirán explorar una variedad de sitios emblemáticos y secretos ocultos de la ciudad. Desde los mercadillos locales, como el mercado de Ben Thanh, hasta los callejones repletos de pequeños puestos de comida, encontrarás alternativas para bucear en la idiosincrasia local.

La ruta de estos tours, por lo general, suele incluir paradas en la Catedral de Notre-Dame y el Palacio de la Reunificación, donde un guía local experto compartirá contigo historias fascinantes sobre el pasado de la ciudad. Además, los tours en motocicleta te brindarán la oportunidad de adentrarte en los barrios locales, experimentando la autenticidad de la vida vietnamita y disfrutando de la hospitalidad de la gente.

La Guerra de Vietnam fue la triste vidriera que puso al país en todos los medios de comunicación del mundo y es, también, una de las razones que encuentran los turistas para visitar este destino. Por lo tanto, recorrer el Museo de los Vestigios de la Guerra, que alberga la exposición más famosa de esta temática, es un plan irremplazable para cualquier viajero que tiene planeado conocer Ho Chi Minh.

Este museo contiene una colección de rezagos militares, fotografías y exposiciones que narran los horrores y las secuelas de la Guerra de Vietnam. La muestra se presenta como un testimonio conmovedor de la resistencia del pueblo civil vietnamita frente a los desafíos de la guerra.

En sus galerías te encontrarás con elementos impactantes, como una vasta colección de armas utilizadas durante el conflicto y la famosa “Sala de Agentes Naranja”, que documenta los devastadores efectos en la población y el medio ambiente del herbicida que fue utilizado para fumigar los campos de arroz. Las exposiciones detallan la historia desde múltiples perspectivas, presentando la realidad de la guerra a través de documentos y testimonios de quienes la vivieron.

La confluencia de autenticidad, sensibilidad y conciencia histórica hace que este museo sea una visita ineludible para quienes desean comprender la complejidad y la humanidad que yacen detrás de los eventos históricos.

Una de las mejores actividades para hacer en Ho Chi Minh es participar de un crucero con cena por el río Saigón. Estos tours nocturnos no solo te llevarán tranquilamente en un paseo por las aguas serpenteantes del río, sino que también te permitirán descubrir parte de la riqueza gastronómica de la región.

El crucero navegará bajo puentes iluminados y frente a los rascacielos iluminados, y mientras tanto podrás disfrutar de una típica cena vietnamita. Los platos tradicionales como el pho, banh mi, y rollitos de primavera son solo algunas de las delicias que, por lo general, se sirven a bordo, permitiéndote saborear la autenticidad y diversidad de la cocina local.

Además, el crucero suele incluir también espectáculos musicales durante el itinerario, que te llevará por el Puente Nguyen Van Tam y el Muelle de Ben Thanh. Si tienes planeado visitar Ho Chi Minh en invierno, que es la temporada seca de la ciudad, podrás optar por descubrir las vistas panorámicas desde la cubierta del barco.

No hay manera de conocer Ho Chi Minh sin visitar Ben Thanh. Este mercado, con su energía vibrante y sus fosforescentes colores deslumbrantes, se alza como uno de los sitios más populares y emblemáticos de la ciudad. Situado en el corazón del distrito 1, Ben Thanh es un crisol de cultura, comercio y autenticidad vietnamita.

La visita a Ben Thanh es una experiencia multisensorial que te sumergirá en el ritmo acelerado de la vida local. Durante la visita, que suele estar incluida en los circuitos de los mejores tours de Ho Chi Minh, podrás explorar los pasillos repletos de puestos de alimentos, ropa, artesanías y productos locales que te acercarán una variedad de ofertas. Desde especias aromáticas hasta tejidos hechos a mano, cada rincón del mercadillo será una muestra de la esencia vientmamita.

Además, en el mercado de Ben Thanh podrás regatear los precios de los vendedores, una costumbre local muy difundida, por lo que podrás comprar muchos objetos a precios de remate. Al margen de las compras, el mercado también es un destino gastronómico muy popular debido a la gran cantidad de puestos de alimentos que ofrece.

El Palacio de la Reunificación, un monumento arquitectónico que ha sido testigo y protagonista de la rica historia de Vietnam, fue construido en 1966 y es un reflejo de la arquitectura moderna de mediados del siglo XX, con líneas limpias y un diseño que fusiona la funcionalidad con la grandiosidad. Su forma distintiva de ala de mariposa y sus amplios jardines evocan elegancia, a pesar de su tumultuoso significado.

Este palacio se encuentra intrínsecamente vinculado al pasado vietnamita, siendo el escenario de eventos cruciales que llevaron a la reunificación del país. Fue allí donde, en 1975, un tanque del Viet Cong irrumpió a través de sus puertas, marcando el fin de la Guerra de Vietnam y la unificación del país. El edificio, anteriormente conocido como el Palacio de la Independencia, fue rebautizado para simbolizar la unidad nacional.

Durante la visita, tendrás la oportunidad de recorrer las salas históricas, los despachos presidenciales y la sala de conferencias, donde se gestaron decisiones clave para el destino de Vietnam. Además, allí podrás conocer la historia de una de las fotografías más icónicas del siglo XX, que fue tomada por el fotógrafo holandés Hugh Van Es y brinda testimonio de la huida de Estados Unidos ante la inminente caída de Saigón.

Una de las mejores formas de bucear en la riqueza cultural de Ho Chi Minh es visitar el Templo Mariamman, una joya arquitectónica que se erige como el único templo hindú en la ciudad. Este sitio sagrado, construido en el siglo XIX, es un testimonio viviente de la diversidad religiosa que ha florecido en Vietnam desde entonces.

Este templo se destaca por su arquitectura, que combina colores vibrantes e intrincadas esculturas que rinden homenaje a la deidad hindú Mariamman, la diosa de la lluvia. Además, marca el punto de encuentro de la comunidad hindú, que se encuentra compuesta, principalmente, por inmigrantes tamil, y que a pesar de ser una minoría religiosa en Vietnam, ha mantenido su importancia cultural y espiritual a lo largo de los años.

Si quieres recorrer otros templos hindúes deberás optar por algunas de las excursiones de día completo desde Ho Chi Minh y visitar otras ciudades cercanas, como Di An y Thuan An.

Si quieres conocer una de las mejores facetas de Ho Chi Minh, que es la culinaria, no puedes dejar de explorar la calle Ben Nghe a través de un tour gastronómico. Esta animada calle es un paraíso culinario que ofrece una variedad de platos típicos. Al participar en estas excursiones, tendrás la oportunidad de descubrir la esencia de la cultura vietnamita.

Una de las delicias que no puedes pasar por alto es el bánh mì, un sándwich que fusiona influencias francesas y vietnamitas. Esta preparación consta de un baguette relleno de ingredientes como carne asada, cilantro, zanahorias encurtidas y mayonesa.

Otro plato emblemático que podrás probar en la calle Ben Nghe es el pho, una sopa de fideos que se ha convertido en un icono de la gastronomía vietnamita. Preparada con caldo de hueso de res o pollo, fideos de arroz, hierbas frescas y láminas de carne, el pho es una de las preparaciones más tradicionales del país.

Para aquellos que buscan algo más aventurero, los bánh xèo son una elección intrigante. Estos crujientes crepes de arroz, rellenos de camarones, cerdo, brotes de frijol y hierbas frescas, ofrecen una combinación perfecta de texturas y sabores. Además, más allá de las degustaciones, también podrás maravillarte con el ambiente local de esta calle, que es una de las preferidas de los locales y es un sitio en el que confluyen con los turistas.