Nápoles en Navidad
La ciudad a los pies de Vesubio es un destino turístico en alza. Vale la pena visitarla durante las Navidades para disfrutar tanto de sus tradiciones como de la gastronomía local
¿Has comprado un billete para el mes de diciembre y te estás preguntando qué ver y hacer en Nápoles? ¡Bien elegido! La capital de Campania se llena de luces y saca a las calles sus pesebres tradicionales.
Nuestro top 10 empieza con el icono de las fiestas napolitanas: esos belenes tradicionales. Sin embargo, en Nápoles hay mucho más…
1. Admira los belenes de Via San Gregorio Armeno
En Nápoles, los pesebres no son simplemente una representación del nacimiento de Jesús sino un fenómeno cultural que mezcla religión, historia y actualidad. Durante la época navideña, la calle San Gregorio Armeno se llena de belenes realizados por las antiguas tiendas de artesanía.
Podrás comprar de todo, desde pesebres enteros hasta figuras individuales, pasando por detalles como cabañas y animales de cerámica. Para ayudarte en esta difícil tarea hemos recopilado una breve lista con los souvenir más típicos:
- Estatuillas de Maradona. No es un secreto, los napolitanos están locos por el fútbol y el argentino es el jugador más querido con creces. El Pibe de Oro condujo el SSC Napoli a la victoria de dos campeonatos a finales de los ochenta y sigue siendo muy querido. Las figuritas de San Gregorio Armeno incluyen a personajes famosos y Maradona no podía faltar
- Scio Scio, un personaje que aleja el mal de ojo. Se representa con la típica buatta, un quemador de incienso que se usaba para difundir aromas
- Corno Rosso, un cuerno de la suerte de color rojo brillante. Según la tradición local se debe siempre regalar, ¡no tienes que comprarlo para ti!
- La Bella ‘Mbriana, un espíritu bueno pero caprichoso. Vive en las casas y favorece solo a las personas que le caen bien. Tradicionalmente es retratada como una mujer hermosa que lleva un vestido blanco y largo
- Pulcinella, el personaje napolitano de la Comedia del arte. Viste una amplia túnica blanca ceñida por un cinturón negro. El sombrero también es blanco y contrasta con la máscara negra que le cubre el rostro. Su característica principal es la ironía que utiliza para mofarse de los poderosos
Mientras decides que comprar, puedes darte un capricho con un calzone napoletano, una pizza rellena de ricotta, tomate, mozzarella y salami. Se puede hornear o freír y en ambos casos es un clásico de la comida callejera navideña. Tras el paseo puedes visitar otro hito del barrio, el Cristo Velado de Nápoles.
2. Patina sobre el hielo en Edenlandia
Edenlandia es un parque temático en el distrito de Fuorigrotta. Hay un poco de todo: coches de choque, una noria, escape room, montañas rusas y mucho más. También cuenta con una gran pista de patinaje llamada “Regno di Ghiaccio”.
De costumbre, un billete cuesta alrededor de 5 € tanto para adultos como para niños. Edenlandia abre de lunes a viernes de 15:00 a 21:00 y de 10:00 a 24:00 los sábados, domingos y festivos.
Llegar es bastante sencillo, se encuentra muy cerca de la estación de metro Cavalleggeri Aosta (línea 2). Si te interesan otras actividades con los peques, te recomiendo leer el post sobre las visitas a Pompeya con niños.
3. Pasea bajo el árbol de Piazza del Plebiscito
La plaza más majestuosa de Nápoles se encuentra a medio camino entre el paseo marítimo y la céntrica Vía Toledo. En Navidad no deberías dejar de dar un paseo por la zona.
Su estructura es algo singular: se compone de dos cuerpos, uno semicircular y otro rectangular. En cada esquina se levantan la Basílica de San Francesco di Paola y el Palacio Real.
Es el salón de Nápoles y hospeda cada diciembre un gigantesco árbol de Navidad. Puede ser un abeto o un cono artificial pero el resultado es igualmente encantador. Dadas las grandes dimensiones de la plaza, a menudo es complementado por un Papá Noel de luces u otras decoraciones.
4. Acude a la lonja de pescado de Porta Nolana
En la noche entre el 23 y el 24 de diciembre, los napolitanos de pura cepa tienen un único objetivo: comprar el pescado más fresco. Para hacerlo suelen acudir a la lonja de pescado de Porta Nolana que es conocida popularmente como “mercato ncopp’e mura”. Vale la pena acudir solamente para ver a los lugareños que se agolpan en los puestos para comprar bogavantes, langostinos, almejas y el “capitone, la hembra adulta de anguila que se utiliza para una típica receta de Navidad.
Mientras tanto, puedes amenizar el paseo probando la “pizza a portafoglio”, una pizza pequeña que se envuelve y cierra como si fuera una cartera. Es un icono del street food napolitano y si te apetece repetir, te recomiendo las creaciones de la Antica Pizzeria Port’Alba (Via Port'Alba 18) y de la Pizzeria Fortuna (Via Mancini 8).
Para profundizar este tema, te aconsejo leer el post sobre los mejores tours gastronómicos en Nápoles.
5. Encuentra a Papá Noel
En el mes de diciembre, Santa Claus llega a los pies del Vesubio. Lo encontrarás en el Parco Robinson, un área verde con árboles y plantas tanto mediterráneas como tropicales. Se encuentra en el perímetro de la Mostra d’Oltremare, el principal recinto ferial del sur de Italia.
La aldea navideña es una etapa obligada si viajas con niños. Además de Papá Noel, los peques pueden decorar un arbolito y los hombrecillos de jengibre, escribir una carta a Santa Claus, escuchar historias y disfrutar del Christmas Circus.
El precio suele rondar los 13 € para los adultos y los 10 € para los niños. Puedes comprar las entradas tanto en Ticketone como en la taquilla.
6. Busca un recuerdo en el mercadillo del Vomero
Como otras ciudades del mundo, Nápoles también instala algunos mercadillos navideños cuando llegan las fiestas. Pasear por ellos y hacer alguna compra es algo que gusta tanto a mayores como a pequeños. En este caso, te recomiendo acercarte al situado en Il Vomero.
Il Vomero es un barrio en lo alto de una colina que domina el centro histórico. En el siglo XVII, familias aristocráticas se trasladaron al cerro para huir de las plagas que azotaban la ciudad. El barrio ha mantenido su esencia y está salpicado de avenidas arboladas, miradores y edificios Art Nouveau que hospedan tiendas de lujo.
Cada diciembre, el barrio hospeda un mercadillo navideño con las típicas casitas de madera. Encontrarás artesanías, belenes, adornos para el hogar, cuadros y mucho más.
Los puestos se encuentran en las calles Via Luca Giordano, Via Enrico Alvino y Via Merliani, en la plaza Muzii, dentro del parque Mascagna y enfrente el mercado cubierto de Via Kerbaker.
Puedes llegar fácilmente con la línea 1 del metro (paradas Quattro giornate y Vanvitelli).
7. Toma un aperitivo en Chiaia
Antes de sentarse a la mesa para la cena de Nochebuena es tradición ir de copas por el barrio de Chiaia. El epicentro de la vida nocturna napolitana se concentra alrededor de una plaza y tres calles: Piazza dei Martiri, Via San Pasquale, Via dei Mille e Via Gaetano Filangieri.
Esta zona se encuentra a poca distancia del litoral y cuenta con una amplia oferta de bares. A continuación te aconsejo mis locales favoritos:
- Barril, un lounge bar con un hermoso jardín. Aquí podrás disfrutar de una copa de vino o de un cóctel original mientras escuchas jazz y bossa nova. Los napolitanos aseguran que hacen el mejor mojito de la ciudad (Via Fiorelli 11)
- Chandelier Cafè, donde cada copa es una obra de arte. A menudo, el 24 diciembre organizan un brunch muy codiciado (Vico Belledonne a Chiaia 34/35)
- Birdy’s Bakery, la panadería americana en el corazón de Nápoles. Tuvo tanto éxito que abrieron una segunda filial en Portici, un ayuntamiento de la cintura urbana (Vico Belledonne a Chiaia 14)
8. Siéntate en la platea del Teatro San Carlo
¿Sabías que Nápoles hospeda el teatro lírico más antiguo de Europa? Fue inaugurado en 1737, ¡39 años antes del Teatro alla Scala de Milán! El rey Carlos III de Borbón encargó la obra a Giovanni Antonio Amadeo, uno de los principales arquitectos del Renacimiento. El edificio se encuentra en el corazón de la ciudad, a dos pasos del castillo y del palacio real.
En el mes de diciembre, el Teatro San Carlo hospeda espectáculos festivos como la famosa comedia napolitana “Natale in casa Cupiello”, conciertos de Navidad, jam sessions de jazz, “El Cascanueces” de Tchaikovsky y otras exhibiciones.
Normalmente, la programación navideña empieza a finales de noviembre y termina a principios de enero. Para más información te recomiendo consultar la web oficial.
9. Saborea los dulces navideños
Nápoles es conocida por la pizza y sin embargo, su gastronomía va mucho más allá e incluye postres con una larga historia. El primero de la lista se remonta a la época de la Magna Grecia, una expresión que indica las áreas de Italia meridional colonizadas por las ciudades-estado helénicas:
- Struffoli, unas bolitas elaboradas con una mezcla de huevos, harina, azúcar, mantequilla y un licor a elección entre limoncello, anís o ron blanco. Una vez fritas se adornan con trozos de cedro, frutas confitadas y almendras garrapiñadas de colores. Para probar los mejores, los locales aconsejan acudir a la antigua pastelería Giovanni Scaturchio
- Divino Amore, unos pastelitos suaves elaborados con almendras, azúcar y fruta confitada. Los reconocerás por el típico glaseado rosa aunque existen versiones modernas recubiertas de chocolate negro. Fueron inventados como homenaje a Beatriz de Provenza, madre del rey Carlos II de Anjou
- Raffiuoli, bizcochos cubiertos con mermelada de albaricoque y pasta de almendras o con crema de ricotta dolce (requesón dulce) y granos de chocolate. Según el folklore fueron inventados en el siglo XVIII por las monjas benedictinas de San Gregorio Armeno. Muchos aseguran que los mejores se encuentran en la Pasticceria Capparelli (Via Dei Tribunali 327)
- Zeppole di Natale, unos sabrosos buñuelos elaborados con patatas hervidas, huevos, harina y mantequilla. Una vez fritos, se espolvorean con azúcar de vainilla y canela. Encontrarás los auténticos en la Pasticceria Ranaldi del barrio Quartieri Spagnoli (Vico Lungo Gelso 97)
10. Visita el Museo Nacional de Capodimonte
Durante la época navideña, la institución cultural suele abrir de manera extraordinaria por las noches. Es la ocasión ideal para pasear entre las obras de arte europeas de los últimos siete siglos.
El sitio real de "Capo di Monte" nació en el siglo XVIII como coto de caza de Carlos de Borbón y está rodeado por un gran parque. Para más información sobre cómo llegar, horarios y entradas, te recomiendo echar un vistazo a la web oficial.
¿Cuál es la temperatura en Nápoles durante el período de Navidad?
En el último mes del año, el clima es generalmente templado. Hablando en plata, las temperaturas fluctúan entre una mínima de 5° y una máxima de 15°. Con un promedio de 120 mm de lluvia, diciembre es el tercer mes más lluvioso del año, mientras que las nevadas son muy raras y se concentran principalmente sobre la cumbre del Vesubio.
Si tienes la suerte de ver esta bonita estampa en vivo, te recomiendo visitar el Vesubio con una excursión organizada. Verás un paisaje atípico donde las superficies cándidas contrastan con el azul del Mediterráneo y las islas de Ischia y Procida en el fondo.