10 cosas que ver y hacer en Estocolmo en invierno
El invierno marca la temporada baja en Estocolmo y trae consigo nevadas y temperaturas gélidas. A pesar del frío, esta época del año ofrece algunos de los paisajes más hermosos de la ciudad y una gran variedad de actividades de entretenimiento. ¡Te cuento todo!
Si eres de los que no le teme a las bajas temperaturas o de los que prefieren conocer a las ciudades con su mejor cara, entonces no puedes dejar de visitar Estocolmo durante el invierno. En esta época, la más característica de la capital sueca, podrás conocer la verdadera idiosincrasia de este destino, disfrutar de deportes de nieve y descubrir bonitas vistas panorámicas.
Entre las mejores actividades que puedes hacer en Estocolmo en invierno se encuentran conocer el archipiélago más famoso de la ciudad en una excursión en crucero panorámico, degustar la gastronomía típica de la época, visitar los saunas, patinar sobre hielo en los canales congelados, descubrir la aurora boreal y tomarte un tiempo para hacer una fika, una tradición local que te permitirá refugiarte del frío durante los descansos de tu recorrido.
1. Descubre los paisajes nevados de la ciudad
El verdadero premio de visitar Estocolmo en invierno es descubrir los paisajes nevados que transforman la ciudad en un paraíso invernal. Uno de los sitios ideales para conocer estos escenarios es el Parque Nacional de Tyresta, en el que los bosques cubiertos de nieve y los tranquilos senderos ofrecen un escape idílico de la rutina urbana. Allí podrás disfrutar de caminatas y contemplar el silencio que caracteriza a estos espacios.
Gamla Stan, el casco antiguo de la ciudad, es otro de los sitios que se visten de blanco durante el invierno. Si bien no es un escenario natural, en sus calles empedradas y entre sus edificios de colores pastel cubiertos de nieve, podrás descubrir los tejados puntiagudos y las plazas adoquinadas que recrean un ambiente medieval.
En Gamla Stan, además, podrás participar en alguno de los mejores tours de Estocolmo, encontrar bares y pubs para experimentar la vida nocturna local que no descansa ni siquiera durante los meses más fríos, e incluso visitar algunos de los museos más destacados de la ciudad.
2. Conoce el archipiélago de Estocolmo en una excursión en crucero panorámico
Conocer el archipiélago de Estocolmo a través de una excursión en crucero panorámico es adentrarse en un paisaje marino único que ofrece una perspectiva amplia de la ciudad y sus alrededores. Durante estos tours, tendrás la oportunidad de navegar por las aguas que conforman el entramado de islas que componen el archipiélago, disfrutando de vistas panorámicas y de los pueblos costeros, que en invierno se destacan por su belleza.
El archipiélago de Estocolmo no solo es un destino seductor durante el día, sino que también se revela como un sitio ideal para descubrir la aurora boreal durante las noches más oscuras. En invierno, cuando las noches son más largas, los cruceros panorámicos se transforman en la plataforma perfecta para presenciar este fenómeno natural.
Además de la fascinación por la aurora boreal, los mejores cruceros de Estocolmo ofrecen la posibilidad de explorar islas pintorescas, visitar cafeterías costeras y descubrir la serenidad del paisaje marino en la época del año que mejor viste los paisajes de la capital sueca.
3. Degusta la gastronomía de invierno en Estocolmo
Probar la gastronomía de invierno en Estocolmo es una experiencia culinaria que te permitirá conocer los sabores auténticos de la temporada. Ya sea en los puestos callejeros o en los restaurantes de la ciudad, podrás explorar una variedad de platos característicos de la península escandinava diseñados para enfrentar las bajas temperaturas.
El köttbullar, las albóndigas suecas preparadas con carne de res o cerdo y acompañadas de salsa cremosa y puré de papas, es uno de los platos más populares de la cocina sueca. El gravlax de salmón curado con azúcar, sal y eneldo que se sirve en rebanadas finas también es propio de la gastronomía de invierno y es una opción que ha ganado fama también en los restaurantes internacionales. Este plato frío es popular en Estocolmo en enero, cuando se inicia la temporada de salmón fresco en Suecia.
Si tienes planeado visitar Estocolmo durante la Navidad podrás degustar el julbord, que es un banquete tradicional sueco que incluye una variedad de platos como arenque en escabeche, jamón glaseado, patés y postres festivos que representan lo mejor de la temporada invernal.
Por último, no puedes dejar de probar la artsoppa, una sopa de guisantes amarillos servida con mostaza y pan de centeno. Este plato calórico es una elección popular para combatir el frío y es apreciado tanto por locales como por visitantes.
4. Visita los saunas de Estocolmo
Una de las experiencias típicas de Estocolmo en invierno consiste en visitar los saunas, cuando la tradición combina los baños calientes con la audaz práctica de sumergirse en los lagos helados. Los escandinavos consideran los saunas como refugios terapéuticos que proporcionan calor en medio del clima gélido y en la capital sueca encontrarás muchas alternativas para esta actividad.
Una característica distintiva de la cultura de los saunas en Estocolmo es la costumbre de combinar los momentos de calor intenso con baños refrescantes en los lagos congelados. Después de disfrutar del calor del sauna, los valientes locales salen al aire libre para hundirse en las aguas frías y cristalinas. Esta práctica, conocida como “avanto”, es considerada revitalizante y se ha arraigado en la vida cotidiana invernal.
En el archipiélago de Estocolmo algunos establecimientos ofrecen experiencias completas de sauna y baño en el lago, brindando a los visitantes la oportunidad de participar en esta tradición única. En sitios más alejados de la capital, como Hellasgården, los saunas junto al lago se encuentran entre los más populares, permitiendo a los visitantes conocer la cultura local mientras disfrutan de la belleza natural del entorno invernal.
5. Patina sobre hielo en los canales congelados de la ciudad
Si quieres hacer una de las actividades más divertidas que propone el invierno en Estocolmo, no puedes dejar de practicar el patinaje sobre hielo en los canales congelados de la ciudad. Durante los meses más fríos del año, los canales como el Strömmen y el Djurgårdsbrunn se transforman en pistas de hielo naturales, ofreciendo a locales y visitantes la oportunidad de deslizarse suavemente mientras exploran la ciudad desde una perspectiva diferente.
Para aquellos que desean iniciarse en el patinaje sobre hielo, en Estocolmo encontrarás fácilmente excursiones que ofrecen clases introductorias en varias ubicaciones, desde parques hasta pistas específicas. Estas lecciones son ideales para principiantes de todas las edades y proporcionan un ambiente seguro y divertido para aprender las habilidades básicas del patinaje.
Patinar sobre hielo en los canales se convierte así en una actividad perfecta para disfrutar en familia, especialmente si tienes planeado visitar Estocolmo con niños. La ciudad ofrece opciones para alquilar patines en diversos tamaños, permitiendo que incluso los más pequeños participen en esta aventura invernal de manera cómoda y segura.
6. Visita las pistas de esquí de Estocolmo
El esquí es otra de las actividades de invierno más populares en Estocolmo, en especial a partir de enero, cuando las pistas inauguran formalmente la temporada y se preparan para recibir a visitantes de todo el mundo.
Entre las pistas más destacadas se encuentra Hammarbybacken, una colina de esquí ubicada a las afueras de Estocolmo que ofrece vistas panorámicas de la ciudad. Con varias pistas de diferentes niveles de dificultad, es un destino popular tanto para esquiadores principiantes como para los más experimentados. La facilidad de acceso y las instalaciones bien equipadas hacen de esta una opción atractiva para quienes desean disfrutar del deporte.
Flottsbro, conocida por sus extensas pistas y servicios completos que van desde alquiler de equipos hasta acogedores refugios para descansar entre las sesiones de esquí, es otra de las pistas más famosas de Suecia. Con una variedad de terrenos, desde suaves pendientes hasta desafiantes descensos, Flottsbro se presenta como un destino versátil para satisfacer las preferencias de esquiadores de todos los niveles, aunque se encuentra orientada a profesionales.
7. Disfruta de las vistas panorámicas en las rutas de senderismo
Fuera de los centros urbanos, otra de las formas de vivir el invierno en Estocolmo consiste en disfrutar de las vistas panorámicas en las rutas de senderismo. Uno de los sitios icónicos para esta actividad es el camino que te lleva al mirador de Fjällgatan, en Södermalm. Desde esta plataforma podrás admirar una panorámica amplia del casco antiguo de Gamla Stan y de los tejados de la capital sueca, creando una imagen que captura la esencia histórica y moderna de este destino.
Otra opción ideal es el sendero que conduce a Skinnarviksberget, la colina más alta de Estocolmo. Desde la cima podrás obtener vistas de 360° que abarcan la ciudad, el archipiélago y los límites de la capital. Este punto estratégico se convierte en un lugar popular para disfrutar de puestas de sol y capturar la belleza local en diferentes momentos del día, incluso durante la noche en Estocolmo.
El Parque Nacional de Tyresta, ubicado a las afueras de la ciudad, también ofrece rutas de senderismo que permiten explorar la naturaleza virgen y disfrutar de vistas panorámicas del bosque y los lagos. Con senderos bien señalizados y una variedad de rutas que se adaptan a diferentes niveles de habilidad, Tyresta es un destino ideal para los amantes de la naturaleza que buscan desconectar del bullicio urbano y disfrutar de la serenidad escandinava.
8. Abrígate bien y pasea por Djurgarden
Pasear por Djurgården es sumergirse en el epicentro del invierno en Estocolmo, donde la isla se transforma en un escenario cubierto por un manto blanco que combina la naturaleza invernal y las actividades culturales. Durante los meses más fríos, Djurgården ofrece una variedad de experiencias únicas, desde paseos escénicos entre árboles cubiertos de nieve hasta la participación en eventos y festivales invernales que celebran la esencia local.
Uno de los atractivos principales de Djurgården en invierno es el Museo Vasa, que alberga en su colección un barco del siglo XVII que emergió de las profundidades del puerto local. Explorar este museo, que se encuentra incluido entre las atracciones de la tarjeta turística de Estocolmo, te permitirá conocer la historia marítima de Suecia mientras te resguardas del frío exterior.
Además, el parque ofrece amplios senderos para pasear y disfrutar de la serenidad del invierno, con áreas para hacer picnics o simplemente relajarse, por lo que también es un sitio ideal para visitar con niños en Estocolmo.
Durante los meses más fríos, Djurgården se convierte también en el escenario de eventos y festivales invernales. Desde mercados navideños hasta celebraciones tradicionales, la isla se llena de vida y color, ofreciendo a los visitantes y locales la oportunidad de participar en actividades festivas y disfrutar de delicias invernales, sobre todo durante la Navidad o durante el Día de San Knut.
9. Deslúmbrate con las auroras boreales de Estocolmo
Si tienes planeado visitar Estocolmo durante el invierno, no puedes dejar pasar la oportunidad de descubrir las auroras boreales durante tu viaje. Aunque Estocolmo se encuentra en una latitud más al sur y las auroras boreales son más comunes en Noruega o en la Laponia finlandesa, aún es posible presenciar este fenómeno natural en noches despejadas durante los meses más fríos.
Uno de los mejores lugares para buscar la aurora boreal en Estocolmo es lejos de la contaminación lumínica de la ciudad, como en las afueras o en áreas con menos iluminación artificial. El archipiélago de Estocolmo, con su combinación de paisajes naturales y tranquilidad, ofrece condiciones propicias para las observaciones. En lugares como las islas más alejadas del centro de la ciudad, la ausencia de luces urbanas aumenta las posibilidades de capturar este fenómeno.
Otra opción para descubrir las auroras boreales es dirigirse hacia áreas elevadas, como colinas o miradores, para tener un mejor campo de visión y disfrutar de un espectáculo más despejado del cielo nocturno.
Además, algunos operadores turísticos en Estocolmo ofrecen excursiones específicas para la observación de auroras boreales, llevando a los visitantes a ubicaciones estratégicas donde las condiciones son óptimas. Estas experiencias a menudo incluyen guías expertos que comparten información sobre este fenómeno típico de la península escandinava.
10. Refúgiate del frío y tómate un tiempo para hacer una “fika”
Si vas a viajar a Estocolmo en invierno, posiblemente decidas incluir una parada durante tu viaje para hacer una “fika”, que es una tradición sueca que va mucho más allá de simplemente tomar un café. La “fika” es un ritual social que implica tomarse un descanso, disfrutar de una pausa y compartir momentos relajados con amigos o familiares, especialmente durante el invierno, cuando el clima se vuelve muy frío.
En Estocolmo, la “fika” es parte integral de la vida cotidiana. Los locales se toman el tiempo para disfrutar de este momento especial en cafeterías, parques o incluso en puestos callejeros. Algunas de las mejores cafeterías de la ciudad, como Vete-Katten o Chokladkoppen, ofrecen un ambiente pintoresco y deliciosos pasteles suecos para complementar esta experiencia tradicional.
La “fika”, entonces, no solo es una pausa para el café, sino también una oportunidad para crear vínculos y fortalecer relaciones. Es una tradición que refleja la importancia de tomarse un tiempo para relajarse y disfrutar de la compañía de los otros, contribuyendo a la calidad de vida y al sentido de comunidad en Estocolmo. Además, durante tu recorrido te permitirá descansar en los días de temperatura bajo cero y tomar impulso para continuar con la visita.
Así que, si recorres la ciudad, sobre todo en invierno, cuando las bajas temperaturas acechan, no te pierdas la oportunidad de participar en esta encantadora tradición y sumergirte en la idiosincrasia de la vida cotidiana sueca.
Las temperaturas en Estocolmo en invierno
Durante el invierno, las temperaturas en Estocolmo son las características del frío nórdico. Los días más cortos y las noches más largas contribuyen a un ambiente gélido que transforma la ciudad en un escenario mágico cubierto de nieve. Las temperaturas diurnas suelen oscilar entre -5° y los 0°, mientras que por las noches pueden descender hasta los -10°.
Este clima invernal crea la oportunidad para que los lagos y canales de Estocolmo se congelen, proporcionando escenarios únicos para actividades como el patinaje sobre hielo. A pesar del frío, en la capital sueca en invierno podrás disfrutar de los paseos por los parques nevados e incluso de las auroras boreales.
La afluencia turística en Estocolmo en invierno
En invierno, debido a las bajas temperaturas, Estocolmo experimenta una afluencia turística menor en comparación con los meses de verano. Sin embargo, es la época que muestra la mejor cara de la ciudad, con paisajes nevados, una amplia oferta cultural que incluye entradas con descuento o gratis en los mejores museos de la capital sueca y muchas propuestas en espacios naturales.
Aunque la afluencia turística disminuye, si optas por visitar Estocolmo en invierno disfrutarás de una experiencia más tranquila y auténtica, en la que podrás conocer la cultura local y participar en las tradiciones invernales de la ciudad.
Los precios en Estocolmo en invierno
Los precios en Estocolmo durante el invierno pueden variar, siendo esta una temporada que generalmente experimenta una merma en la afluencia turística. Aunque algunos servicios y alojamientos pueden ofrecer tarifas más económicas en comparación con la temporada alta de verano, es importante tener en cuenta que Estocolmo es conocida por ser una ciudad relativamente cara durante todo el año.
No obstante, ten en cuenta que, a pesar de las temperaturas frías, los mercadillos navideños y los eventos festivos a menudo ofrecen experiencias únicas sin costes elevados. Además, también podrás ahorrar dinero si reservas con antelación y si eliges viajar durante los meses más fríos, como es el caso de enero en Estocolmo.
¿Qué llevar en la maleta para visitar Estocolmo en invierno?
El invierno en Estocolmo puede resultar muy frío, con temperaturas bajo cero y nevadas copiosas, por lo que te aconsejo que en la maleta incluyas lo siguiente:
- Abrigos de invierno
- Botas impermeables y cómodas
- Calcetines térmicos
- Guantes impermeables y táctiles
- Gorro de lana
- Bufandas de lana
- Chubasquero
- Suéteres de lana
- Pantalones polares
- Polar térmica