Las 8 mejores actividades al aire libre en Estrasburgo

Estrasburgo es una ciudad que se disfruta mejor caminando. Sus calles adoquinadas, sus canales y su mezcla de arquitectura francesa y alemana la convierten en un lugar único. Un tour privado te permitirá descubrir su historia y sus secretos acompañado de un guía local.

Desde la imponente Catedral de Notre-Dame hasta la pintoresca Petite France, cada rincón de la ciudad tiene una historia que contar. Además, al ser un tour privado, podrás adaptar el recorrido a tus intereses y moverte a tu propio ritmo.

Alsacia es una de las regiones vinícolas más famosas de Francia, y recorrer sus viñedos es una experiencia imprescindible para cualquier amante del buen vino. En esta excursión, visitarás bodegas familiares, conocerás el proceso de elaboración del vino alsaciano y, por supuesto, disfrutarás de una cata de sus variedades más emblemáticas.

Además, la ruta del vino de Alsacia pasa por pueblos sacados de un cuento, como Riquewihr y Eguisheim, con sus casas de entramado de madera y calles llenas de flores.

Si hay una forma de conocer una ciudad en profundidad, es a través de su comida. En un tour gastronómico por Estrasburgo, podrás probar los platos más representativos de la región, como el chucrut alsaciano, la tarte flambée o el kougelhopf, un bizcocho tradicional.

El recorrido incluye visitas a mercados locales, panaderías artesanales y bodegas donde podrás degustar vinos de la región. Una experiencia perfecta para los que disfrutan descubriendo nuevos sabores.

Si hay algo que hace especial a Alsacia, son sus pueblos de cuento. En una excursión desde Estrasburgo, podrás visitar lugares como Colmar, Kaysersberg o Ribeauvillé, cada uno con su propio encanto y su aire medieval.

Las casas de colores, los balcones llenos de flores y los pequeños canales crean una atmósfera mágica que no deja indiferente a nadie. Un viaje perfecto para quienes buscan desconectar y sumergirse en un paisaje de postal.

Si te apetece recorrer la ciudad de una manera cómoda y divertida, un tour en segway es la opción ideal. Con este vehículo eléctrico, podrás deslizarte por el casco histórico, los parques y las orillas del río Ill sin cansarte.

Con la ayuda de un guía, conocerás los principales monumentos de Estrasburgo mientras disfrutas de la experiencia de moverte en segway, una opción perfecta para quienes quieren ver mucho en poco tiempo.

Estrasburgo es conocida como la Capital de la Navidad, y sus mercadillos son de los más bonitos de Europa. En una excursión por la región, podrás visitar los famosos mercados navideños de Colmar, Obernai o Kaysersberg, donde las luces, la música y el aroma a especias crean un ambiente mágico.

Si viajas en diciembre, este es un plan imprescindible para empaparte del espíritu navideño y disfrutar de un chocolate caliente mientras paseas entre casetas de madera repletas de adornos y productos artesanales.

Si eres un apasionado del vino, una excursión enológica por Alsacia te permitirá conocer de cerca la tradición vinícola de la región. Visitarás algunas de las bodegas más prestigiosas, probarás vinos blancos como el Riesling o el Gewürztraminer, y aprenderás sobre la producción y características de cada variedad.

Además, la ruta pasa por viñedos y pueblos históricos que hacen que la experiencia sea mucho más que una simple cata de vinos: es una inmersión en la cultura alsaciana.

Uno de los barrios más bonitos de Estrasburgo es la Petite France, un entramado de calles empedradas y casas de madera que parecen sacadas de un cuento de hadas. Pasear por sus canales, cruzar sus puentes y descubrir sus rincones es una de las experiencias más especiales que ofrece la ciudad.

Este barrio es perfecto para perderse sin prisas, sacar fotos espectaculares y sentarse en una terraza junto al agua para disfrutar del ambiente relajado de Estrasburgo.