10 cosas que ver y hacer en Queenstown en invierno
Queenstown es imperdible en invierno: festivales únicos, deportes extremos, recorridos de película, aventuras montañosas y mucho más. ¡Descubre todo lo que te ofrece!
La ciudad de los deportes de aventura es un paraíso invernal que deleitará tus sentidos durante la temporada más fría del año. Entre las mejores cosas que hacer en Queenstown durante esta temporada encuentras varios festivales de temporada, disfrutar de un relajante baño en las aguas termales de Onsen y maravíllate con las vistas de montañas colmadas de nieve durante un paseo en barco por los pintorescos lagos.
Asimismo, son imperdibles las visitas a Mildford Sound, esquiar y descubrir los escenarios míticos de El Señor de los Anillos. En este artículo encuentras 12 cosas que hacer y ver en Queenstown en invierno para que no pierdas de vista lo más top al sur de Nueva Zelanda.
1. Pasea en barco por el lago Wakatipu
Encabezando la lista de recomendaciones en Queenstown se encuentran los paseos en barco. Desde el lago Wakatipu hasta los ríos Kawarau y Shotover podrás disfrutar de magníficas vistas de las montañas nevadas durante la temporada de invierno.
Hay varias opciones de cruceros en Queenstown entre las que elegir, pero todas siguen más o menos la misma ruta por el lago. Serán unos 60 - 80 minutos surcando las aguas de esta formación glacial, la diferencia principal radica en los estilos de transporte. Puedes contratar tu paseo en lancha rápida, barco de vapor, ir en canoa o pasear en catamarán.
En todos los casos suelen estar incluidos los servicios de capitanía de la nave, refrigerio y bebidas a bordo del barco. Y, para los más aventureros, pueden combinar la experiencia con uno de los planes para adictos a la adrenalina: el puénting con las montañas nevadas como telón de fondo.
2. Sobrevuela los Alpes desde Queenstown
Recomiendo explorar el Piopiotahi o Milford Sound durante los meses de invierno. En esta estación del año, el Milford es mucho más tranquilo y está menos masificado. También puedes disfrutar de cruceros más baratos, además del cielo despejado perfecto para sobrevolar la zona y captar las mejores postales del famoso Miter Peak, el lago Wakatipu y los Alpes del Sur.
Para llegar a Milford Sound desde Queenstown, se puede elegir entre coger un vuelo en aeroplano o contratar un vuelo en helicóptero por Remarkables, lo que suele incluir el servicio de transporte ida y vuelta al alojamiento. En cualquiera de los casos, la actividad es una experiencia de diez.
3. Disfruta de los festivales de invierno de Queenstown
Queenstown es un centro de festivales invernales neozelandesas. Podrás disfrutar de deportes de montaña, teatro de calle, disfrutar de música electrónica al aire libre, beber vino caliente y, por supuesto, ¡fuegos artificiales!
Durante el invierno tienen lugar el Festival de cine de las montañas de Nueva Zelanda, ideal para parejas y grupos de amigos. También es la época del DFS Winter Fireworks y el Matariki Arrowtown Lights, por cierto, dos de las cosas que hacer en Queenstown con niños. Asimismo, tienen lugar el Snow Machine, el Winter Pride y los juegos de invierno.
Son tantos los eventos que, si tu viaje es entre junio y septiembre, lo mejor es seguirles la pista en su página web oficial aquí.
4. Anótate en una excursión al Monte Cook
Una de las cinco paradas que te conquistarán en Nueva Zelanda es el Monte Cook, otro de los Patrimonios de la Humanidad por la UNESCO ¿La razón? Entre otras cosas porque se trata de la montaña más alta del país.
Esta montaña se eleva más de 3.700 metros y destaca entre el conjunto de encantos naturales del Aoraki o Parque Nacional Monte Cook donde se emplazan 72 glaciares, y más de 100 cumbres por las cuales aventurarse.
Este es uno de los destinos favoritos para los senderistas. La ruta más famosa es la Hooker Valley, que requiere de unas 4 horas de recorrido hasta la cima y el grado de exigencia es medio. También hay otras alternativas como el Kea Point Track que toma solo una hora pero requiere un nivel alto de preparación, o el Mueller Hut que toma unas 9 horas.
Lo mejor es reservar una excursión al Monte Cook con expertos. De seguro encontrarás un sendero ajustado a tu gusto para apreciar el parque, así como, los famosos lagos Pukaki y Tekapo.
5. Visita Milford Sound
El Piopiotahi, como se dice en maorí, forma parte del Te Wahipounamu, uno de los Patrimonios naturales de la UNESCO. Este fiordo al sur de Nueva Zelanda es una de las gemas naturales con mayor número de actividades a disposición de los visitantes.
Desde escalada de montaña, senderismo, hacer kayak, rafting, puenting, submarinismo o disfrutar de un crucero relajante, tú decides el estilo de la aventura que quieres, el Milford Sound lo tiene todo para ti.
Para llegar a Milford Sound, se puede elegir entre alguna de las mejores excursiones de un día desde Queenstown. En su mayoría se incluye transporte, almuerzo, servicio de guía y hasta paseos en barco. Estas excursiones suelen durar unas 12 horas, ya que Milford Sound está a 4 horas en coche de Queenstown. Sin embargo, la mitad de la aventura consiste en llegar a Piopiotahi, los parajes son muy bonitos y cada uno con mejores vistas que el anterior.
6. Participa en el Festival de luces LUMA
Aunque ya te mencioné otros eventos, el Festival de luces LUMA Southern Light Project merece un punto aparte y no puedes dejar de participar en él durante tu viaje a Queenstown en invierno. Se celebra anualmente durante el fin de semana del cumpleaños del Rey, por lo general, la última semana de mayo o junio.
El evento es totalmente gratuito y se lleva a cabo en los Jardines de Queenstown. Durante el festival, los jardines se transforman en un espectáculo de luces y sonido de última tecnología, creando una experiencia sensorial mágica e inolvidable.
El Festival de luces LUMA Southern Light Project también cuenta con camiones de comida y bares improvisados en los jardines que ofrecen una gran variedad de opciones gastronómicas para disfrutar junto a amigos y familia.
7. Participa en una cata de vino en las bodegas de Queenstown
Las catas de vino a menudo son vistas como actividades de verano pero es que Queenstown es tan particular que su bebida de invierno es el mulled wine, que no es otra cosa más que vino caliente y las principales casas de vino del país presentan sus propias versiones, así que, ¿por qué no aprovechar para visitar la mejor región vinícola de Nueva Zelanda?
El valle de Gibbston es bien conocido por su alta calidad en la producción de vinos. Sus bodegas boutique son pequeñas y ofrecen una experiencia personalizada al reservar un tour por bodegas. El enfoque está en la producción de lotes de alta calidad de Pinot Noir, su vino estrella.
Algunas de las bodegas más populares son Kinross, Gibbston Valley Winery y el viñedo Waitiri Creek Wines Hay opciones de rutas vinícolas para todos los gustos, desde las que incluyen almuerzo hasta aquellas que ofrecen vino caliente para disfrutar admirando las bellas vistas invernales.
8. Disfruta de un día de película en el Monte Aspiring
Aunque Bilbo Bolsón dijo en la película del Hobbit: “en estos lugares somos gente sencilla y tranquila y no estamos acostumbrados a las aventuras”; cuando visitas el Parque Nacional del Monte Aspiring, lo que te espera cuenta lo opuesto. Se trata de una aventura de película donde los pequeños elfos, hobbits y magos hicieron vida durante una larga temporada.
Este es uno de los paseos imperdibles en la ciudad, especialmente si tienes un itinerario de 3 días en Queenstown o más. Verás postales muy bonitas de ríos, lagos y fiordos.
Además, tan pronto llegas a Glenorchy encontrarás varios de los escenarios naturales que se usaron para adaptar las obras de Tolkien, incluidos algunos de los escenarios para El Señor de los Anillos y el Hobbit como la icónica Torre de Saruman. Asimismo, verás espacios utilizados para Las crónicas de Narnia. Al contratar una excursión a Glenorchy y Paradise ¡Obtienes el pase para un día de película!
9. Prueba el vino caliente en un bar de hielo
¿Sabías que Queenstown no tiene uno, sino dos bares de hielo? Es bastante sorprendente para un lugar tan pequeño. Incluso en un gélido día de invierno, la experiencia es inevitable. No es sólo por los contrastes de temperatura, sino por la variedad de bebidas (incluyendo el vino caliente), perfectas para la temporada a pesar de sorber tu trago de un vaso hecho enteramente de hielo. Es una alucinante experiencia de interior de Queenstown en invierno.
Los dos bares de hielo son :Below Zero Ice Bar y Minus 5 Ice Bar, son muy similares y elegir entre ellos no es crucial. Sin embargo, debo confesar que, para las familias con niños, recomiendo la segunda opción. Ambos están situados en el corazón de Queenstown y suelen tener el mismo precio y beneficios.
Con tu entrada de unos 38 € aproximadamente, se incluyen dos cócteles y el acceso al local. Además, tienen precios más baratos para los niños y las bebidas sin alcohol. No lo mencioné antes ¿Cierto? Es que, a diferencia de los bares de hielo comunes, aquí son bienvenidos los peques.
10. Báñate en las piscinas termales Onsen
Si antes de hacer tu viaje buscaste los lugares imperdibles en Nueva Zelanda, muy probablemente vistes las icónicas fotos de parejas y grupos pequeños bañándose en unas piscinas con los Alpes de fondo. ¿El lugar? Las piscinas termales Onsen.
Este impresionante balneario alberga las piscinas termales privadas más famosas de Nueva Zelanda. Una búsqueda rápida en Instagram o cualquier otra red social, revelará miles de fotos con vistas espectaculares. Onsen es tan popular que las plazas para disfrutar de sus instalaciones se reservan con meses de antelación, sobre todo en invierno, la temporada favorita para disfrutar de ellas.
Para una pareja, el coste medio de un baño en un jacuzzi semi interior o exterior es de unos 70 €. Serán 60-70 minutos de un indulgente baño que puede ser compartido por hasta cuatro personas y solo requieres recorrer 10 minutos en coche desde Queenstown para disfrutar de esta experiencia, muy cerca del cañón Shotover. Debo señalar como dato adicional que si buscas las actividades más románticas de Queenstown, apunta ésta en tu listado.
11. Observa las estrellas desde Moke Lake
Si buscas una experiencia más envolvente, divertida y gratuita que hacer al sur de Nueva Zelanda, únete a una de las excursiones para observar las estrellas en Queenstown.
Durante los meses de invierno, la Vía Láctea es visible alrededor de la ciudad, especialmente si visitas el popular Lake Tekapo, o si prefieres disfrutar del evento como los locales, acércate al lago Moke entre Queenstown y Glenorchy. Tendrás la oportunidad de mirar por un potente telescopio, divisar planetas e incluso ver la estación espacial internacional.
Desde ambos lugares, las estrellas son absolutamente impresionantes. No olvides consultar el radar de las auroras australes para planificar tu paseo y garantizar tu asiento en primera fila en el mejorespectáculo de luces naturales del mundo.
12. Lánzate por las pistas de esquí de Queenstown
La temporada de esquí en Queenstown se extiende desde mediados de junio hasta principios de octubre. Es una de las cosas que hacer en la ciudad imperdible durante esta temporada y, tienes cuatro pistas principales a elegir. A continuación, las encontrarás organizadas por la distancia desde el centro:
- Coronet Peak, emplazada a unos 20 minutos en coche desde el centro, Peak es la pista de esquí más cercana, ofrece magníficas instalaciones y lo mejor de todo, puedes anotar tu visita entre las cosas que hacer en Queenstown de noche, ya que presume de esquí nocturno.
- The Remarkables es la verdadera experiencia alpina a 45 minutos en coche del centro. Esta pista es perfecta para las familias, principiantes, novatos y esquiadores avanzados.
- Cardrona, ubicada a unos 70 minutos en coche desde el centro, el Cardrona Alpine Resort es popular por su amplio parque de atracciones y su variedad de cafés y alojamientos en la montaña.
- Treble Cone esta es la pista más vertiginosa de todas. Se encuentra a unos 85 minutos desde el centro. Es la más grande y popular entre esquiadores, practicantes de snowboard y en línea general de los deportistas extremos.
Las temperaturas en Queenstown en invierno
En invierno, Queenstown tiene un clima frío y fresco, perfecto para hacer senderismo y practicar deportes de aventura. Los meses de invierno en Queenstown son de junio a agosto.
Durante esta temporada, las temperaturas medias oscilan entre los 0°C y los 8°C, con nevadas frecuentes en las montañas circundantes. Las temperaturas pueden bajar aún más durante la noche, alcanzando temperaturas bajo cero. Puedes seguir el estado del clima en ésta pagina web.
Conviene vestirse por capas y llevar ropa de abrigo cuando haga frío. Es esencial llevar guantes y gorro, sobre todo al salir al aire libre y por la noche. Además, las botas pueden ser útiles para mantener los pies calientes y protegidos.