10 cosas que ver y hacer en Mallorca
¿Viajas a Mallorca próximamente? Mira esta guía de todo lo que debes ver y hacer para disfrutar de Palma en unas vacaciones inolvidables.
Esta isla paradisíaca en pleno Mediterráneo es el destino perfecto al que hacer una escapada. ¡Palma de Mallorca lo tiene todo! Playas de ensueño, cultura, una deliciosa gastronomía, actividades en plena naturaleza, unas vistas de infarto y mucha fiesta.
Éstas son las 10 cosas que ver y que hacer en Mallorca que no te puedes perder durante tu viaje. ¡Bienvenidos a la isla bonita!
1. Únete a un paseo en barco por Mallorca
Mallorca es una de las islas del Mediterráneo más bellas y sus playas son un destino en sí mismas para miles de viajeros, que ven en sus paisajes una representación terrenal del paraíso.
Sus paisajes rivalizan en belleza con los del Caribe gracias a sus recónditas calas de aguas cristalinas, arena blanca y exuberante vegetación. Unos parajes de ensueño que te invitan a relajarte disfrutando de la brisa marina y del sol, ya sea tumbado en la orilla del mar o a bordo de un barco que te descubra el litoral mallorquín.
No cabe duda de que ir a la playa a relajarse es uno de planes que hacer en Mallorca sí o sí en unas vacaciones pero en caso de que quieras pasar una jornada al aire libre de un modo diferente y divertido, te recomiendo que te unas a una excursión para explorar la costa en barco y las profundidades marinas, una de las mejores actividades para hacer en Mallorca. Por mi experiencia, ¡es toda una aventura y un recuerdo inolvidable!
Hay tiempo para tomar el sol, para hacer snorkel, para admirar las vistas de este paisaje tomando una copa, para explorar parques naturales, para nadar con los peces dentro de cuevas e incluso para hacer una barbacoa en alta mar.
Suena fantástico, ¿verdad? Para saber más sobre los paseos en barco por Mallorca, no te pierdas este artículo donde podrás conocer algunas de las opciones más destacadas.
2. Recorre el palacio de la Almudaina y museo de la Catedral
Al salir de la catedral de Mallorca es inevitable toparse con su museo y con el palacio de la Almudaina. Para completar la visita anterior, te aconsejo entrar primero al museo de la catedral de Palma al salir del templo.
Museo de la Catedral
Se ubica en la plaza de la Seu y se accede a él a través de la casa de la Almoina. Si te interesa el arte es una visita que vas a disfrutar mucho porque el interior está decorado con pinturas murales mudéjares y alberga colecciones muy interesantes de pintura, escultura, orfebrería y artes suntuarias que pertenecen al museo Capitular. El recorrido se hace muy ameno y se ve enseguida, así que podrás pasar rápidamente a la siguiente atracción turística que es el palacio de la Almudaina.
Palacio de la Almudaina
Se trata de una antigua alcazaba islámica que el rey Jaime I el Conquistador transformó en palacio gótico para ser su residencia en Mallorca. En la actualidad, el palacio de la Almudaina se sigue usando para actos oficiales y se puede visitar. Se localiza justo enfrente de la catedral de Mallorca.
El edificio llama la atención por la mezcla de estilos que presenta, una fusión de arquitectura musulmana y gótica levantina pero, en mi opinión, el exótico entorno en el que se enclava es también digno de admiración.
Especialmente los jardines medievales de S’Hort del Rei, de inspiración historicista y andalusí. Es difícil no quedar prendado de la belleza que desprenden sus fuentes, albercas y naranjos. ¡No te cansarás de hacer fotos!
Son muchos los tours por Mallorca que incluyen este y otros monumentos. Te recomiendo que reserves alguno de ellos para adentrarte en la ciudad y conocer de la mano de un guía experto los entresijos de todos sus atractivos. Aquí te dejo una selección con los mejores tours y excursiones de Mallorca.
3. Conoce la Lonja de Mallorca
Próximo al palacio de la Almudaina, en el paseo de Sagrera, se encuentra la Lonja de Mallorca. Construida en el siglo XV, se trata de un exponente del gótico civil mallorquín y es uno de los edificios más bonitos que ver en Mallorca.
Su exterior es sencillo pero está repleto de detalles como las imágenes religiosas, las almenaras, las gárgolas o los arcos decorados con filigranas de piedra al estilo gótico flamígero.
Sin embargo, en mi opinión, es el interior de la Lonja el auténtico tesoro del edificio. Un espacio diáfano pensado para ser la sede del comercio de la ciudad, donde la sensación de vacío es imponente y poderosa.
Hay que sentarse para admirar las ventanas y los pilares retorcidos que brotan desde el suelo para unirse a las nervaduras de las bóvedas de crucería.
Te recomiendo hacer un tour en bicicleta para recorrer la Lonja, que te llevará además a conocer otros lugares imprescindibles de Mallorca, como la Catedral o el Castillo de Bellver. Se trata de un a forma divertida y a la vez sana y respetuosa con el medio ambiente. Te dejo nuestro post sobre los mejores tours en bici por Mallorca. También tienes este otro sobre los recorridos en segway por la ciudad.
4. Ve de tapeo por el barrio de La Lonja
El barrio de la Lonja es uno de los más alegres de Palma, así que es perfecto para dar una vuelta y perderse entre sus calles llenas de restaurantes, galerías de arte y tiendas de todo tipo.
Después de visitar el edificio de La Lonja puedes aprovechar para tomar un café y una típica ensaimada mallorquina en alguna terracita, disfrutando del sol y de las vistas de este barrio en cuyos edificios se mezcla de manera muy singular lo gótico, lo renacentista y lo modernista.
Si prefieres los vinos y tapas, te recomiendo ir a alguno de los bares que se ubican en los alrededores de la calle Apuntadores y la plaza Drassana, donde podrás probar la gastronomía tradicional de la isla y también otras propuestas innovadoras. ¡Hay para todos los gustos! También puedes aprovechar para hacer alguno de los mejores tours gastronómicos que recorren este barrio y otros de la ciudad.
Al acabar, no puedes irte del barrio de La Lonja sin acercarte a alguna de sus tiendas donde podrás comprar un bonito souvenir de tu escapada a Mallorca. Desde perfumes y libros hasta ropa de estilo ibicenco.
5. Toma una copa de cava en la Plaza Mayor
Vale la pena continuar la ruta por el casco antiguo para llegar hasta la plaza Mayor, otro de los enclaves imprescindibles que ver en Mallorca y uno de los lugares con más encanto al hallarse rodeada de monumentos históricos muy interesantes como la iglesia de San Miguel (el templo cristiano más antiguo de Palma) o varios palacetes y patios, que son fantásticos ejemplos de la arquitectura civil de la ciudad entre los siglos XV y XVII.
No sólo te recomiendo acercarte hasta la plaza Mayor, la más grande de la ciudad, por sus atractivos turísticos sino también para disfrutar del animado ambiente que aquí se respira. En este lugar podrás tomarle el pulso a la ciudad y conocer su lado más auténtico, pues es el punto de encuentro favorito de los palmesanos para charlar y pasar un rato relajado.
Por eso, si tu viaje coincide con el fin de semana, un buen plan que hacer en Mallorca es ir hasta la plaza Mayor para sentarte en la terraza de uno de sus alegres bares y ver las actuaciones musicales que aquí se celebran mientras saboreas una copa de cava mallorquín para probar las especialidades locales.
Además, por las mañanas también se organizan mercados donde puedes aprovechar para curiosear y comprar algún souvenir en sus puestos. Hay desde artesanías y ropa hasta productos delicatessen.
6. Disfruta con las vistas del castillo de Bellver
En la ruta por Palma no puede faltar una visita al castillo de Bellver. En primer lugar por su singularidad, pues se trata de una fortificación con base circular única en España que data del siglo XIV y es una obra maestra de la arquitectura gótica-levantina.
En el pasado fue residencia real pero en la actualidad alberga el museo de Historia de la ciudad de Palma de Mallorca así que puedes aprovechar para conocer tanto el monumento como sus colecciones.
En segundo lugar porque desde su ubicación, en lo alto de una colina en Poniente y rodeado por una frondosa vegetación, hay unas vistas panorámicas espectaculares de la ciudad de Palma y su bahía, el llano de Mallorca y la sierra de Tramuntana. De hecho, el nombre del castillo de Bellver procede del catalán antiguo “bell veure”, que significa bella vista, por lo que es un sitio tremendamente fotogénico.
Si te gustan los castillos antiguos, la historia o fotografiar bonitos paisajes, creo que una visita al castillo de Bellver en Palma te encantará porque no deja a nadie indiferente.
Además, durante las tardes de verano se suelen organizar ciclos de conciertos al aire libre en su impresionante patio de armas circular. De modo que la música es otro de los motivos para conocer esta fortaleza.
7. Asiste al fenómeno del solsticio de invierno en Es Baluard
Hablando de fortalezas y de museos, cerca de la Lonja se sitúa otra fortificación del siglo XVI que se ha reinventado para la cultura y el turismo.
Aquí encontramos Es Baluard, el Museo de Arte Moderno y Contemporáneo de Palma. Si te apasiona el arte es otra visita imprescindible que hacer en Mallorca por sus colecciones aunque debo confesar que este lugar es especial para mí por otra razón y es que su mirador es un punto estratégico para contemplar el fenómeno del “solsticio de invierno”.
Tanto desde aquí como desde la terraza interior del museo se puede observar cómo la luz del sol atraviesa la nave central de la catedral de Mallorca y se proyecta sobre el rosetón de la fachada principal, transformándolo en un caleidoscopio gigante entre el 18 y 24 de diciembre siendo el día 21 el clave.
8. Adéntrate en los baños árabes de Mallorca
El palacio de la Almudaina no es el único vestigio de la presencia islámica que ver en Mallorca pues en el casco antiguo a pocos pasos de la catedral hay otro edificio muy interesante que la isla conserva: los baños árabes de Palma.
Datan del siglo XI y en esta cultura, el ritual hammam era una modalidad de baño de vapor que los antiguos musulmanes usaban para purificar el cuerpo y el espíritu. Asimismo, los baños eran también un importante centro de reunión social en el mundo islámico medieval, desde oriente hasta Al-Ándalus.
¿Qué verás en la visita?
Se construyeron siguiendo el modelo romano (área fría, templada y caliente) pero los restos que han llegado a nuestros días corresponden a la sala caliente. Los baños árabes de Mallorca se encuentran en la calle Serra 7 y la entrada sólo cuesta 2 euros, por lo que te aconsejo entrar para observar un auténtico pedacito de la historia medieval de España. Son la construcción mejor conservada de la era islámica en la isla.
Durante mi visita me llamó la atención el buen estado de conservación en el que se encuentran, si tenemos en cuenta los muchos años que tienen. Su puerta con arco de herradura da paso a una sala interior cuadrada cuyas doce columnas sostienen la cúpula semiesférica con varios lucernarios que permitían el paso de la luz natural creando una atmósfera íntima muy placentera.
Junto a esta sala hay un segundo espacio que se cree que podría ser la sala templada de los baños árabes. Aquí se proyecta un vídeo explicativo de pocos minutos sobre el origen de este hammam en Mallorca, el cual nos ayuda a imaginar mejor cómo fue este lugar en su época de esplendor.
Vive el ritual hammam en Palma
Ahora bien, ¿por qué conformarte con imaginar cómo era el ritual hammam en los baños árabes de Mallorca cuando puedes vivir la experiencia por ti mismo durante tus vacaciones?
Si tras la visita te pica la curiosidad, te recomiendo pasar una tarde en alguno de los que actualmente existen en la ciudad. ¡Es uno de los planes que hacer en Mallorca que me encantan!
Al entrar verás que no se trata del típico spa sino que las salas se caracterizan por su decoración de estilo andalusí y en ellas reina el silencio sólo interrumpido por el rumor del agua de las piscinas termales.
Sumergido en esa atmósfera de calma, el aire perfumado, la luz tenue de las velas y la música andalusí logran hacerte sentir como una sultana y transportarte por un instante a esa etapa dorada de la antigua Al- Ándalus.
9. Sal de fiesta por Santa Catalina
Mallorca es famosa por sus paradisíacas calas de arena blanca y de aguas turquesas, donde relajarse tomando el sol durante el día. Pero también lo es por su alma fiestera. Miles de turistas de todos los rincones del planeta viajan hasta la isla para vivir la noche mallorquina a tope.
En Palma hay muchísima variedad de ocio nocturno pero el barrio de Santa Catalina, al oeste del casco antiguo, es uno de mis lugares favoritos que te recomiendo conocer. Es uno de los barrios emergentes de la ciudad donde muchos extranjeros han abierto sus negocios dándole un aire ecléctico y cosmopolita que se mezcla con las casas modernistas, las placitas y el lado más tradicional de Mallorca.
¿Dónde ir de fiesta en Palma?
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Para comenzar la noche, si buscas una coctelería de ambiente agradable y exótico te sugiero ir a Chakra (calle de Sant Magí,40) donde podrás disfrutar de unas ricas bebidas y tapas indias al son de música de Bollywood.
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Si te aparece ver algún espectáculo en vivo, en la misma calle puedes continuar en LAB Cocktail Bar (calle de Sant Magí, 22) para tomar unos cócteles de autor imbuido en una atmósfera vintage y con clientela internacional.
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Uno de los sitios que más me gustan de Santa Catalina es Patrón Lunares (calle de la Fàbrica, 30) ideal para picar y tomar la primera ronda de la noche. Dispone de un menú creativo y unos cócteles muy originales. Además, la cantina tiene una historia muy interesante la cual se refleja en la estética del local.
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Muy cerca se encuentra el emblemático Hotel Hostal Cuba (calle de Sant Magí, 1), un edificio de aspecto colonial que tiene una terraza con unas vistas preciosas al puerto y a la catedral. Además, es también un gastrobar y una discoteca, por lo que allí podrás bailar hasta que el cuerpo aguante.
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Si resistes en pie hasta la mañana siguiente, en Santa Catalina puedes desayunar al estilo francés en la pastelería La Madeleine de Proust (Anníbal, 17) o al estilo sueco en El Perrito (Anníbal, 20).
10. Visita la catedral de Mallorca
Es el primer sitio que ver en Mallorca. Conocida cariñosamente como La Seu, la catedral de Santa María es uno de los templos góticos más deslumbrantes del mundo y el símbolo de la ciudad de Palma. Seguramente la habrás visto en multitud de fotografías pero contemplarla en persona es toda una experiencia.
De su majestuosa fachada destacan las enormes columnas de la puerta Mayor y las delicada ornamentación de la puerta Mirador, aunque el lado más fotogénico de la catedral de Mallorca se encuentra en el Parque del Mar, un espacio con un gran lago que evoca tiempos pretéritos cuando el mar bañaba la muralla.
El pintor Santiago Rusiñol era un enamorado de La Seu y en su libro “La isla de la calma” (1912) le dedicó un capítulo donde animaba a los visitantes a acceder a la catedral para disfrutarla en todo su esplendor. Solía decir que “¡Por fuera verás la armadura, pero entra y verás el alma!” y sus palabras son tan ciertas ayer como hoy.
Al entrar su amplitud impresiona y el precioso juego de luz y color que crean las vidrieras de la catedral de Palma anima el espíritu. ¡Aquí se encuentra el famoso “ojo del gótico”!, el rosetón más grande de cualquier catedral gótica en el planeta.
En el recorrido se aprende muchísimo y se puede observar la huella que dejaron en ella artistas como Miquel Barceló en la capilla del Santísimo o Salvador Gaudí, quien se ocupó de la reforma del conjunto aplicando tintes modernistas que le han dado ese aspecto tan singular.
Sube a las terrazas de la Seu y alucina con las vistas
¿Sabías que en verano se puede subir a las terrazas de la catedral de Mallorca? Si tienes la ocasión, te recomiendo que reserves tu plaza en la web oficial porque ver la ciudad de Palma, el mar Mediterráneo y la propia arquitectura del templo desde ahí arriba es una experiencia inolvidable.
¡No exagero! La catedral de Mallorca es una de las más altas de Europa y para que te hagas una idea es más alta que la inmensa catedral de Colonia, así que las vistas son asombrosas.
Escoge bien la fecha de tu viaje a Mallorca
Cualquier época del año es buena para conocer la capital mallorquina. Sus hermosas playas la hacen única para una escapada de verano pero te aseguro que la isla de Mallorca no te defraudará vayas cuando vayas, pues cuenta con planes de todo tipo para cualquier fecha. Una prueba de ello es este listado de artículos que te dejo a continuación para que conozcas todas las opciones por meses del año:
- 10 cosas que ver y hacer en Mallorca en enero
- 10 cosas que ver y hacer en Mallorca en febrero
- 10 cosas que ver y hacer en Mallorca en marzo
- 10 cosas que ver y hacer en Mallorca en abril
- 10 cosas que ver y hacer en Mallorca en junio
- 10 cosas que ver y hacer en Mallorca en julio
- 10 cosas que ver y hacer en Mallorca en agosto
- 10 cosas que ver y hacer en Mallorca en septiembre
- 10 cosas que ver y hacer en Mallorca en octubre
- 10 cosas que ver y hacer en Mallorca en noviembre
- 10 cosas que ver y hacer en Mallorca en diciembre
O quizás para decidir la fecha de tu viaje prefieras saber antes las 10 cosas que ver y hacer en Mallorca en verano, en invierno o si viajas con niños a la isla te interesará conocer los mejores planes navideños en Mallorca.
Para ayudarte con la organización de tu viaje, te recomiendo que consultes nuestras guías en función del tiempo que tengas para disfrutar Mallorca:
- Qué ver y hacer en Mallorca en 1 día
- Qué ver y hacer en Mallorca en 2 días
- Qué ver y hacer en Mallorca en 3 días
- Qué ver y hacer en Mallorca en 4 días
- Qué ver y hacer en Mallorca en 5 días
- Qué ver y hacer en Mallorca en 7 días
Otros consejos
Uno de los consejos que suelo dar para optimizar un viaje es planificar con antelación o al menos consultar previamente cómo vas a llegar desde el aeropuerto al centro de la ciudad. Aquí tienes la información referente a los traslados entre el aeropuerto y Mallorca.
Asimismo, te recomiendo que mires los autobuses turísticos de Mallorca, una forma muy útil de recorrer la ciudad a la vez que te van contando los detalles y la historia de sus monumentos. Y por supuesto, para aquellos que buscan comodidad en los desplazamientos, no dejes de reservar las mejores excursiones en Mallorca y sus alrededores. Solo te queda hacer la maleta y ¡a disfrutar!